Revista Materia
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Los fanales de Número37: Pequeños universos de naturaleza y ficción

PorKarla Riquelme Vargas 26 abril 2023

Fanales Número37 a contraluz ©Foch

Número37 es el proyecto donde Francisco Lacalle combina su fascinación por el coleccionismo de objetos y el mundo natural. Inspirado por los antiguos gabinetes de curiosidades victorianos, crea fanales con mundos de fantasía donde conviven insectos, elementos de la naturaleza, objetos antiguos y modelados a mano por él, principalmente en porcelana. Su objetivo al crear estos mundos de fantasía es «la valoración y conservación de nuestros entornos naturales», desde la sensibilización estética. «Mi intención al crear estos mundos naturales / ficticios, es que al observarlos, nos lleven mentalmente a un lugar especial, natural, mágico, evocando olores, sensaciones o incluso despertando recuerdos de algún espacio natural lleno de detalles», explica.

Acá Francisco, diseñador industrial y magíster en artes escénicas,  nos cuenta en primera personas sobre sus inspiraciones, procesos y aprendizajes trabajando en su Número37, donde el crea y realiza los fanales y los procesos relacionados a la entomología, y su pareja y socia, Alejandra Cuevas, se encarga de la parte gráfica, creando collages digitales en torno a la misma temática.

INSPIRACIÓN Y REFERENTES

«Número37 nace el año 2017 a partir de un proceso de búsqueda artística relacionada a desarrollar mi trabajo manual, a mi afición por el coleccionismo y a mi interés por la época victoriana, lo que me llevó a revivir la fascinación de esos años por el estudio, admiración y exhibición de la naturaleza y sus curiosidades.

Fue en ese proceso que descubrí que uno de los patrones que unía mis colecciones y las que hoy comparto con mi señora, es la ‘museografía acumulativa’, ese gusto por rellenar cada rincón libre dentro de un espacio y el disfrute que significa la búsqueda de estos objetos en su mayoría exóticos, provenientes de distintos lugares del mundo. El referente más clásico de este coleccionismo extraño y acumulativo es el concepto de wunderkammer, cuartos de maravillas o gabinete de curiosidades.

Esta práctica o forma de coleccionismo comenzó en el siglo XVI y consistía en reunir una gran cantidad de piezas, ya fueran de las artes tradicionales, ciencias naturales e incluso objetos considerados ‘mágicos’. Estos tesoros coexistían en un mismo espacio, que podía ser desde un mueble hasta una o más habitaciones. Se dice que estos gabinetes son los precursores de los museos modernos y sobre todo de los museos de historia natural.

El último período de fama de estos gabinetes de curiosidades fue durante la época victoriana a fines del siglo XIX. En las representaciones de estos espacios se observan una gran cantidad de fanales (o domos) de vidrio que contenían y exhibían taxidermia y conservación entomológica. Estos fueron, en especial, los objetos que robaron mi atención y que me hicieron buscar la forma de lograr una captura instantánea de la naturaleza a través de la creación de pequeños mundos ficticios».

PROCESO DE RECOLECCIÓN

«Para crear estos mundos dentro de fanales de vidrio, opté por trabajar con insectos, en especial mariposas y coleópteros, ya que además de poseer una belleza extraña e inigualable, es posible recolectarlos de manera ética, un tema muy importante para mí. Actualmente la mayoría de los especímenes con los que trabajo provienen de un criadero en Perú, en el que viven su ciclo completo de vida antes de ser recolectados y certifica que no se comercializan especies protegidas ni en peligro de extinción.

Además, recolecto especímenes que encuentro ya muertos durante caminatas y exploraciones por diferentes partes de Chile, momentos en los que también recolecto elementos naturales como piedras, ramas, hojas y más. Esta recolección de elementos también la realizo de forma respetuosa y consciente, procurando recoger solo ramas, hojas, semillas, musgos y líquenes que se hayan desprendido de manera natural y que no signifique un deterioro al ecosistema en el que se encuentran».

Los fanales de Número37: Pequeños universos de naturaleza y ficción

Francisco Lacalle ©Tomás Montealegre

Los fanales de Número37: Pequeños universos de naturaleza y ficción

Detalle de fanal con escarabajo ©Foch

NUEVOS RECURSOS

«Todo mi conocimiento entomológico y de conservación de estos especímenes lo he aprendido de forma autodidacta. Al morir, las mariposas quedan con sus alas juntas, por lo que deben pasar por un proceso de rehidratación de cuerpo y alas para poder manipularlas. Luego de varios días humedeciéndose, se pasan a unas pequeñas tablillas de madera, donde se fijan usando alfileres y papel vegetal para darle el ángulo deseado a las alas, patas y antenas. Una vez listas y ya secas nuevamente, las mantengo en cajas como parte de mis colecciones.

Dentro de esta búsqueda por desarrollar mis habilidades manuales, una de las primeras cosas que aprendí fue a trabajar con cerámica china, durante un año que viví en Hong Kong. Realicé cursos de modelado y fabricación de elementos cotidianos como teteras, platillos y otros. Tiempo después y de regreso en Chile, llamó mi atención la porcelana, tanto por su herencia clásica, elegante, pero más que nada por su color blanco y la capacidad de ser translúcida. Con este material he creado piezas que representan elementos naturales y anatómicos que también incluyo en mis fanales, para darles una nueva dimensión, elevar su textura, jugar con la composición y complementar el balance entre lo natural y lo artificial”.

PROCESO DE CREACIÓN

«Una vez que tengo todos mis objetos ya sea naturales o creados por mí, clasificados en mis colecciones, mi proceso creativo comienza con la selección de alguno de esos elementos, ya sea una mariposa, una rama o lo que me llame la atención en cuanto a color, textura o movimiento. Esto me da el pie para comenzar la creación de uno de mis mundos de fantasía natural. Por ejemplo, una roca volcánica negra me hace pensar en conceptos relacionados a lo oscuro, algo casi gótico, y busco mariposas u otros elementos que me evoquen algo similar para complementar esos conceptos. A su vez, una mariposa de colores brillantes me puede invitar a pensar en la primavera o un liquen me inspira a representar un bosque húmedo. Cada fanal nace de forma diferente.

El ser autodidacta ya sea en el desarrollo artístico o en la entomológica, he cometido muchos errores, por ejemplo, romper muchas mariposas en un principio de mi trabajo, lo que dejaba muchas con alas y cuerpos ‘inservibles’. De la tristeza de botar ese material y pensando en cómo darles otra vida, nace mi proyecto ‘Ala Rota’, a través del cual tomo un cuerpo y le sumo cuatro alas de diferentes especímenes, para crear mariposas ficticias e imposibles de ver en la naturaleza, haciendo así más evidente lo fantasioso de estos fanales contemporáneos, siempre inspirados en el gabinete de curiosidades.

Por otro lado, continuando con mi pasión por los gabinetes de curiosidades he tomado como referentes a las Venus Anatómicas de los siglos XVII y XVIII, representaciones de tamaño real hechas en cera de mujeres en posiciones sugerentes, concebidas para estudiar la anatomía humana. Esta unión entre ciencia y arte llamó mucho mi atención, llevándome a buscar la forma de replicar estas piezas en mi estilo y así nacieron mis propias Venus Anatómicas, donde pude unir dos de mis principales aficiones: modelado a mano y el rescate de juguetes antiguos, en especial muñecas. Para lograr una imagen más cercana a las Venus originales, rescato muñecas antiguas, y cuando quiero un concepto más lúdico busco muñequitos Kewpie, clásica referencia de un querubín, diseñado por Rose O’Neil en la década de los 60».

Más información: @numero37_cl

Los fanales de Número37: Pequeños universos de naturaleza y ficción

"Ala Rota" mariposas construídas con diferentes alas ©Número37

Los fanales de Número37: Pequeños universos de naturaleza y ficción

Colección Número37, fanales y Venus Anatómicas ©Tomás Montelegre

Los fanales de Número37: Pequeños universos de naturaleza y ficción

Fanal mariposas ©Tomás Montealegre

Los fanales de Número37: Pequeños universos de naturaleza y ficción

Francisco ha aprendido de forma autodidacta la conservación entomológica @Tomás Montealegre

Los fanales de Número37: Pequeños universos de naturaleza y ficción

Fanal porcelana ©Tomás Montealegre

Los fanales de Número37: Pequeños universos de naturaleza y ficción

Detalle mariposas y liquen ©Foch

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