La Fundación IDA y su trabajo por conservar y activar la memoria material argentina

La Fundación IDA (Investigación en Diseño Argentino) es un referente en Latinoamérica por su trabajo de construcción de colecciones y archivos, conservación y activación de la cultura material argentina a través de la gestión cultural. Apuntan a ser un agente activo para el aprendizaje y la innovación en gestión de fondos patrimoniales de diseño, más que un archivo o colección estático. Lo que les interesa es genera un conocimiento profundo de la disciplina, desde la «relectura y formulación de temas históricos y actuales».

Liderada por el diseñador industrial y gestor Wustavo Quiroga, cuenta con un equipo multidisciplinario conformado por diseñadores, gestores culturales, artistas, restauradores y comunicadores, que trabajan junto a consultores que son leyendas del diseño argentino, como Hugo Konan (diseño industrial), Rubén Fontana (diseño gráfico), Susana Saulquin (diseño indumentaria), Norberto Chaves (concepto), entre otros.

Este año la Fundación IDA cumplió ocho años valorizando el diseño argentino, una etapa donde han logrado establecer valiosas alianzas locales e internacionales, con centros culturales, museos, universidades y empresas, y  construir un acervo que constituye uno de los fondos patrimoniales de diseño más importantes del país, en miras a convertirse en el Museo Argentino del Diseño. Este contiene obras materiales, desde íconos del diseño argentino a maquetas, moldes o piezas que dan cuenta del proceso creativo, como documentos, cuadernos de obras, bocetos, registros audiovisuales, escritos y documentos de información y comunicación, como manifiestos, publicaciones o material gráfico. Acá abarcan cuatro áreas: Diseño Industrial y de Producto, Diseño Gráfico y Comunicación Visual, Diseño de Indumentaria y Textil y Pensamiento y Gestión, «que se van ampliando según la investigación evolucione a diseño arquitectónico, de interiores, paisajístico, audiovisual, multimedia».

Pero su trabajo no se queda solo en resguardar y administrar el patrimonio, sino que apunta a “dinamizar” como dicen ellos este acervo que han construido, a través de distintas actividades de educación, difusión e investigación, con el fin de hacer consciente la importancia del diseño a la sociedad argentina, tanto en su contexto histórico, así como en la influencia que tiene en su vida cotidiana.

Sus líneas de trabajo van desde la protección de estos bienes culturales, conservando, restaurando y catalogando material patrimonial (documentos, piezas y objetos); el desarrollo de la disciplina a través de la investigación, de variantes del diseño, casos emblemáticos, fuentes de documentación y análisis “del papel del diseño en el desarrollo, reconociendo particularidades en las distintas regiones y sus vinculaciones internacionales”, explican. Y luego la vinculación con el medio externo, el público y demás instituciones, el trabajo que hacen en gestión y difusión, haciendo redes con otros centros documentales, facilitando la circulación de sus colecciones y colaborando con la creación de exposiciones de otras instituciones o generando las propias, la última exposición «Territorio Híbrido» es sobre la herencia del diseño y la decoración del los años 30 en Argentina y Su director hizo la curaduría.

Su área de divulgación incluye también publicaciones que rescatan y profundizan en la labor de diseñadores, territorios o casos emblemáticos, por ejemplo, el libro “Intermitencia. Diseño Mendocino”, el catálogo de “Matrices, mujeres del diseño”, exposición organizada por ellos que rescata el legado de las mujeres en la disciplina, o “Ideas materiales: arte y diseño argentino en la década del 60”, coeditado por Fundación IDA y el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba).

Además, entregan valiosa información en su plataforma online y redes sociales sobre el diseño argentino. En línea puedes revisar Épica, un programa curatorial multiformato que va revisando los hitos del diseño argentino por década, desde 1920 hasta 1980 (hasta el momento), haciendo conexiones de los distintos objetos o creaciones con el contexto histórico-cultural de la época.

Otra área interesante es su labor en educación, cuentan con programas en línea, alianzas con  instituciones académicas, material didáctico para estudiantes de distintos niveles y guía pedagógica para sus formadores, charlas y conferencias, y actividades como Apertura de Archivos, un recorrido por el patrimonio de la fundación “con la presencia del diseñador, herederos o investigadores especializados, para enriquecer el diálogo y la información sobre lo expuesto» y Estudios Contextuales, “una experiencia de arqueología contemporánea que dialoga con la ciudades y los entornos” donde hacen visitas a lugares o circuitos urbanos para visualizar sus patrimonio.